martes, 25 de diciembre de 2012

Los Deseos







Previamente en Sexo Gay En La Ciudad:

Mientras volvía de viaje desde Rosario no pude evitar pensar en Mar del Plata (así le decía a un chico que me interesaba quien finalmente me había invitado a tomar algo justo el fin de semana que me iba de la ciudad). Cuando le pregunté a mis amigos si lo habían visto en mi ausencia, me contestaron que lo vieron irse temprano del boliche con un chico. Ya sabemos que significaba eso. Lo que no sabía es que al fin de semana siguiente íbamos a estar muy cerca…



De vuelta en la ciudad, durante la semana, como buen investigador, averigüé si había pasado algo entre ellos, deseaba que no fuera así, pero todo parecía indicar que estaban ‘en algo’ o ‘saliendo’.  Entonces mis expectativas para encontrarlo ese fin de semana eran nulas. Hasta que sucedió. Mar del Plata se acordó que nos debíamos un trago, entonces me invitó a tomarlo ahí en el boliche para conversar un poco. Claro que él ya había estado tomando. Me di cuenta, por como me miraba, como me abrazaba y por lo cerca que se ponía al hablarme. Decidimos por algo que nos guste a los dos, había 2x1 de Para-corazones (coincidentemente), y lo aprovechamos.  Un poco fuerte quizás, pero a mí nunca me hace nada, así que acepté. Nos fuimos a bailar juntos un rato y en un momento comenzamos a conversar contra una pared. Ahí fue cuando apareció el chico con el que estaba saliendo y nos comenzó a mirar de reojo, pero tímidamente. Se quedó bailando muy cerca con otros amigos. Mar del Plata se dio cuenta y me confesó que estaba en algo con el pero que no era nada serio. Me dijo casi gritando por la música: ‘No sé, como que le falta algo, no me termina de cerrar’. En ese momento el chico nos miró, había escuchado todo, puso una cara de cuando te rompen el corazón, y decidió seguir bailando y alejarse de a poco. Mar del Plata mientras tanto, muy cerca de mí, me dijo al oído: ‘No creo que funcione’.  Y ahí me preguntó si yo estaba saliendo con alguien. Le dije que no, que hacía mucho que no. Entonces cuando me acarició como compadeciéndose de mí y por unos micro-segundos, se quedó mirándome fijo, estábamos a menos de tres centímetros y podía sentir en los labios que en cualquier momento se venía ese beso que tanto había deseado todo el año.

Pero me puse a pensar si era ese beso lo que realmente deseaba. El beso de un tipo que estaba un poco borracho, al que parecía gustarle pero no se animaba a decírmelo. Un tipo que estaba saliendo con alguien y que no le importaban para nada los sentimientos de los demás. ¿Era ese el tipo de hombre que deseaba para mí?

Hace 60 columnas atrás, en la primera columna, cedí ante el beso de un chico que estaba bastante borracho (o drogado, quien sabe). Y fue totalmente en vano, porque no significó nada, ni siquiera fue divertido y como si fuera poco, después ni se acordaba que había sucedido, ni de quién era yo. Hoy en día lo sigo viendo y sigue igual de borracho tratando de besarse con cualquiera. Besar a Mar del Plata iba a significar que después de 60 columnas, no había aprendido nada y me parece que no valía la pena. Entonces le dije que mejor nos íbamos a bailar. Y eso hicimos. No era el momento, no era él. 




Esta temporada, dos de mis ex se comprometieron en casamiento. Hace poco vi a uno de ellos desde el balcón de un bar. Estaba con el mismo chico que se iba a comprometer y pensé que a esta altura ya debe estar casado. Siempre me pregunté que hubiera sido de mi si seguía con él. Toda mi vida hubiera sido diferente. Pero a veces, las cosas pasan por algo. Quizás no tenía que seguir con él, porque el destino tiene un alguien diferente preparado para mí. Quizás mi destino es seguir soltero para seguir escribiendo estas columnas ¿quien sabe? Sin embargo, todo el mundo sabe que casarme es uno de mis grandes deseos. De hecho, todos los años en mi cumpleaños, es uno de mis tres deseos. Es por eso que a la gente le extraña que todavía no haya encontrado a esa persona (a mí también me extraña por cierto). Siempre me preguntan o mejor dicho me cuestionan: ¿no será que sos muy exigente?¿estás buscando en los lugares correctos?¿estás realmente abierto a conocer a alguien nuevo?¿no estarás enviando señales incorrectas?¿te estarás juntando con la gente que correcta?¿estás poniendo una barrera?¿estarás deseándolo tanto que los otros se asustan?¿lo deseas realmente como decís o es una fachada para esconder otra cosa?¿tu forma de vestir los estará intimidando?. A esta altura he escuchado de todo, desde preguntas ridículas hasta los más locos consejos. Pero la verdad es que no estoy haciendo nada fuera de lo común, estoy solo siendo yo. Y creo que lo que quiero hoy en día, es alguien que me quiera así. Alguien con quien compartir y pasarla bien, aceptando las diferencias y aprendiendo uno del otro. Es lo que siempre he deseado y no me parece algo imposible, porque lo tuve y quizás no lo supe valorar. Amé y fui amado, solo que nunca coincidieron las circunstancias de ambos. Algún día estoy seguro que van a coincidir. Y no es por nada, pero creo que no me merezco menos que eso, no quiero conformarme con lo primero que aparezca, quiero alguien espectacular, alguien que me vuele la cabeza y si hay que luchar un poco para conseguirlo, quiero un amor de película, por más cursi que suene. No solo estoy dispuesto a conseguirlo, sino que también estoy listo para una relación. Si hay algo que no quiero es terminar en una de esas relaciones que veo últimamente en donde la gente está por estar, porque sí, porque estaba ahí, porque sucedió y era práctico. Para no tener que esforzarse mucho. Algunas personas solo se conforman con que lo quieran un poco. Yo no. Quiero enamorarme y conseguir estar con esa persona que siempre soñé y que el sentimiento sea mutuo. Que haya algo fuerte de los dos lados y no solo del mío. Eso es lo que deseo. Si hay que esperar, espero.

Muchas veces los deseos se convierten en sueños y los sueños se convierten en realidad. Una de estas calurosas noches de verano, de repente soñé con EL, un chico con el que nunca había soñado antes. Alguien que conocía hace mucho, pero nunca le había prestado atención y la pasamos tan bien en el sueño, que desde entonces comencé a mirarlo de forma diferente y ahora siempre que lo veo recuerdo ese sueño.  Sueño en el que no solo teníamos sexo, sino teníamos una química increíble. Algo que me sorprendió porque nunca me hubiera imaginado estar con alguien como EL. Siento que quizás hay algo ahí que debería explorar, porque no muchas veces me sucede que veo alguien y siento que tendríamos la más increíble química. Siento que EL también siente algo extraño y raro cuando me ve, pero que todavía no está seguro de lo que es o no lo explora porque no es el momento. Pero quien sabe algún día sueña conmigo y comienza a fijarse en mí. Es muy raro pero siento que cuando tengo a alguien en la cabeza, de alguna forma, las cosas se ordenan y terminan poniéndolas en mi camino. Es lo que llamamos destino. Tener esa esperanza, ese deseo y esa incertidumbre, me anima a seguir luchando por lo que quiero. Y seguramente la próxima temporada, mi película con EL va a continuar. Siempre tuve mejor suerte en el amor, los años impares, es un hecho. 




Mientras eso sucede, lo mejor creo que es pensar en mí, en quererme a mí, en cuidarme a mí, mi corazón, mi salud. Porque entre todo ese desgaste de buscar a alguien, a veces nos olvidamos de nosotros mismos. Entonces decidí volver a hacer algo que hace mucho no hacía: volver correr. Y al volver a hacerlo, me sentí mucho mejor. Me llevó a donde todo comenzó hace 6 años cuando comencé un día a correr, escuchando Coldplay y no paré hasta bajar casi 30 kilos. Sacarme todo ese peso de encima por mí mismo y para mí mismo, perseverar y triunfar. Sentirme libre otra vez y volver a encontrarme, más maduro pero con el mismo corazón, con la ilusión de encontrar un corazón, en el corazón del país. Cada lágrima una catarata de enseñanza, cada deseo un sueño, cada sueño un esperanza. Cuando era chico, tenía mucho miedo de quedarme solo, de que mis padres no me aceptaran y que mi timidez no me permitiera nunca tener amigos. Hoy puedo decir que crecí muchísimo en ese sentido y tengo una familia y unos amigos que se sienten como familia, que me quieren tal cual soy. Entonces por ahora, voy a seguir disfrutando de lo que tengo y no de lo que me falta. Disfrutar también del amor a esta ciudad y por fin, después de muchos años puedo al fin decirlo: disfrutando de amarme. Porque como dice el conocido transformista Ru Paul: ¿Si no te amas a vos mismo, como diablos vas a amar a alguien más? Amén-se.




‘Quizás esté en la oscuridad, quizás esté de rodillas. Quizás esté entre el espacio entre los dos trapecios. Pero mi corazón sigue latiendo y mi pulso hace sonar catedrales en mi corazón…Cada sirena una sinfonía y cada lágrima una catarata. Y puedes herirme, herirme muy fuerte, pero aún así levantaré mi bandera’

Gracias a Lugaresgaycba por haberme dado este espacio por 60 columnas. A todos los que me leen y comentan, a los amores y los desamores que tanto me enseñan. Nos leemos en la quinta temporada en el otoño del 2013 con mucho más Sexo Gay En La Ciudad!

Pablo Martín Acuña

Pregunta para el foro: ¿Cómo deseás que sea tu próximo amor?

martes, 4 de diciembre de 2012

Los Viajes

Para alejarme un poco de todo el debacle del Sr. R (ahora Sr. RIP) y como festejo de mi cumpleaños, decidí viajar y comenzar mi año nuevo en un nuevo lugar. Entonces tomé a mis mejores amigos: Tomás, Damián y Santiago,  y nos fuimos a Rosario.

Cuando llegué hace diez años a Córdoba, todavía no existían ni el Facebook, casi nadie tenia celulares y se podría decir que para conocer gays tenias que realmente remarla. En esa época no tenía ningún amigo gay, estaba en una ciudad que prácticamente no conocía y como si fuera poco era extremadamente tímido. Entonces qué mejor que entrar a los chats telefónicos, muy de moda en esa época. Era entretenido tener con quien hablar anónimamente sin preocuparme mucho por lo que pensaban de mí, si algo malo o vergonzoso pasaba, podías cortar el teléfono y listo. Desde entonces siempre me llevé bien con los rosarinos. Digamos que al chat entraban desde todo el país, pero con los rosarinos siempre tenía mucha más química. No sé por qué. Bah, si lo sé. Eran mucho más desprejuiciados que en el resto de las provincias. Eran y de hecho siento que todavía lo son, no por nada el primer casamiento gay fue en esa provincia. En los chats teléfonicos ni siquiera importaba si eran heterosexuales o gays, siempre estaban dispuestos a hablar de lo que sea. El mejor sexo telefónico que tuve, siempre fue con rosarinos. De hecho hasta en un momento tuve una relación a distancia un chico. El era seguridad en un edificio de oficinas. Hablábamos todos los días y nos hacíamos compañía, estaba bueno tener alguien con quien conversar de las cosas que me pasaban en esa época, que claro, no se las podía contar a nadie. Todas las noches esperaba con ansias su llamado y hasta compartíamos cenas por el altavoz. Nos contábamos todo, teníamos sexo telefónico y después nos quedábamos charlando hasta altas horas de la madrugada. Nuestros sentimientos fueron creciendo y hasta me ofreció viajar a visitarlo pero no pude. Me dio miedo de que todo saliera mal y no tenia como dar explicaciones a mis padres, amigos, etc. La relación se desgastó y finalmente terminamos. Pero siempre me quedó esa sensación de que tenía que viajar alguna vez y lo fui posponiendo hasta ahora.

Con mis amigos llegamos a Rosario con todas las expectativas de un fin de semana largo espectacular. La ciudad nos recibió con un día espectacular y con hombres igual de espectaculares. Como olvidar ese profesor de educación física que ejercitaba a sus alumnos en la costanera. Claro que había un pequeño detalle. Mis tres amigos estaban en tres diferentes situaciones sentimentales. Uno al principio de una relación, otro en el medio de una relación y otro en una avanzada relación. Yo, claro, solterísimo. De todas formas eso no iba a intervenir en nuestros planes de pasarla bien. 

Aunque durante el viaje, tengo que admitir, que había momentos en que todos le escribían a sus chicos y yo extrañaba eso. Alguien a quien contarle como la estabas pasando, ya que mis mejores amigos estaban ahí. Son esos momentos que extrañas a esa persona que está pensando en vos y pendiente aunque sea un momento del día, recibir ese mensaje para saber si estás bien. Es muy lindo eso y hasta este viaje no había sentido esa falta.

En un momento, en un almuerzo, mi amigo Damián nos preguntó: ¿Para crecer hay que sufrir?. No me acuerdo como surgió la pregunta ni porque. Pero es algo que me quedé pensando desde entonces. No recuerdo que contesté en ese momento, pero creo que de alguna forma, el sufrimiento, en cualquiera de sus formas, la mayoría de las veces, te hace crecer más rápido. Si hay algo que aprendí de todo este tiempo que estuve solo y sufrir por eso, es que quizás no fue en vano, aprendí muchas cosas este año de mí, que no tenía claras antes.

Estuve mucho tiempo pensando y desgastando parte de mí en el Sr RIP, para finalmente darme cuenta que no era quien yo creía que era. Y darme cuenta de eso fue duro, pero también fue lo mejor podría haber pasado. Ahora sé que no siempre las cosas son como uno cree y que a veces, el enamoramiento ciego, no sirve de nada. Mi historia con mi ex, Tián, también me dejó varias cosas claras con respecto a lo que yo espero de una relación. Cosas que yo pensaba que quería para una relación resultaron no aplicarse en la práctica. Creo que crecí mucho en ese sentido, en apreciar lo que tengo, apreciar las amistades y relajarme un poco más con respecto al amor. Porque cuando lo tuve, en realidad extrañaba mucho estar con mis amigos. Algo que no había pasado antes. Y si bien podría parecer que es que me acostumbré a la soltería, creo que en realidad tiene que ver con que aprendí a disfrutarla. Disfrutar de salir con tus amigos más allá de estar o no de novio, no salir con el único objetivo de ‘estar con alguien’ y simplemente pasarla bien, bailar, compartir con tus amigos. No digo que no sea lindo conocer a alguien nuevo, besarse y tener sexo, sino digo que todo tiene su encanto. Cuando estás de novio uno tiende a pasar menos tiempo con sus amigos y a salir menos y eso quizás me hubiera evitado este año de conocer a mucha gente nueva que hoy son mis amigos.

Eso es algo que también descubrimos en este viaje a Rosario. Si bien era lindo salir y estar rodeado de gente nueva, yo personalmente extrañaba a mi gente. Ver algún conocido y conversar un rato, escuchar y bailar la música que nos gusta. Las salidas a bailar en Rosario la verdad no llenaron nuestras expectativas y creo que en gran parte fue por eso, porque no lo sentíamos nuestro lugar. ¿Quiere decir esto que finalmente habré encontrado mi lugar?¿Será Córdoba donde finalmente me siento como en casa?


















Durante 10 años me hice esa pregunta. Siempre estuvo la posibilidad de ir a Buenos Aires y seguir ahí. Pero no creo que hubiera sido lo correcto. Quizás ahí hubiera conocido a alguien y me hubiera puesto de novio o hubiese tenido más opciones en todos los aspectos de mi vida. Pero la verdad es que me hubiera perdido de muchas cosas lindas que me pasaron en esta ciudad.

Quizás en otra ciudad no hubiese seguido escribiendo estas columnas que me hacen tan feliz. Es muy loco como un viaje puede llevarte a pensar estas cosas y ver todo desde otra perspectiva. Es como cuando mis amigos me usan de consejero para sus relaciones, siendo que yo soy el solterón del grupo. A veces un punto de vista diferente puede hacer la diferencia. Es por eso que, a mi entender, esta bueno nunca dejar de lado los amigos. Siempre digo que las parejas que se encierran en sí mismas, muchas veces no crecen porque no tienen esa otra perspectiva, que siempre para bien o para mal, nos hace falta.

En Rosario, si bien no pasaron cosas trascendentales, nos reímos y divertimos mucho entre nosotros, compartiendo, paseando, conociendo la ciudad, haciendo shopping, viendo gente nueva. Léase también como 'baboseandonos por los hombres rosarinos'. En un momento hasta planeamos entrar a una Universidad haciendo el acting de que estábamos averiguando sobre las carreras, solo para ver chicos, jajaja. Es gracioso, porque en esta ciudad también hay chicos hermosos, pero por lo general no le prestamos atención, solo porque los tenemos cerca. Nuestra estadía en un apart hotel, sirvió para compartir cosas cotidianas y hacer cosas que generalmente no hacemos cuando estamos cerca, al menos no tan seguido. De alguna forma el viaje sirvió para unirnos y darnos cuenta que quizás los que buscábamos fuera, siempre lo tuvimos y mucho más cerca de lo que creíamos. Lo que más recuerdo del viaje fueron esos momentos que estuvimos juntos. Es por eso que una de las últimas noches, brindamos por eso, por nuestra amistad. Porque Rosario siempre estuvo cerca, pero nuestra amistad siempre estuvo más cerca.

Eso me hizo pensar que quizás en el amor me pase lo mismo. Quizás siempre tuve al amor de mi vida frente a mis narices y nunca presté atención o no me di cuenta ¿Qué pasa si lo que estuve buscando toda mi vida estaba mucho más cerca de lo que pensaba?



Es por eso que en el viaje de vuelta, mientras mis amigos se mensajeaban con sus chicos, yo le mensajeaba a mis amigos que habían quedado en Córdoba para saber de lo que había pasado en nuestra ausencia. En especial de lo que había pasado con un chico que me había estado interesando últimamente, al que le decimos Mar Del Plata. Antes del viaje, o mejor dicho, justo ese fin de semana que viajaba, me había invitado a tomar algo. Obvio que esas invitaciones solo suceden justo cuando me estoy yendo de la ciudad. Es por eso que en el viaje de vuelta le pregunté a mis amigos que habían salido si lo habían visto. Es cuando me contaron que lo vieron muy cerca de un chico con quien después se fue a su casa en un mismo taxi. Ya todos sabemos que significa eso. Lo que no sabía es que justo al fin de semana siguiente iba a estar muy cerca de él, de Mar del Plata. Que nuestros labios iban a estar a tres centímetros y que en un momento, abrazados junto a una pared me iba a confesar al oído algo que no esperaba escuchar…

Continuará…

Pablo Martín Acuña
 pabl3te@hotmail.com 
 Sexo Gay en la Ciudad 
 Sexo Gay En La Ciudad 
 Pabl3te

Pregunta para el foro: ¿Encontraste el amor en esta ciudad o tuviste que viajar para encontrarlo?

martes, 9 de octubre de 2012

Las Mentiras


Era el día del amigo y habíamos salido a festejar. Unas horas antes en facebook, mi estado decía: "Que no me diga Feliz Día Del Amigo, que no me diga Feliz Día del Amigo…". Un claro mensaje para el Señor R. Y lo había logrado, en todo el día, ambos habíamos estado conectados y no me lo dijo, no me había escrito ningún mensaje tampoco, ni nada. Hasta que esa noche, después de 7 meses sin vernos, finalmente sucedió. Lo tenía frente a frente. Podría haberlo evitado, pero fue imposible. Estábamos en el mismo boliche y sentía que si no hablaba con él y lo esquivaba, me iba a arrepentir. Entonces decidí acercarme y saludarlo, temblaba de solo verlo de espaldas. Se dio vuelta y lo primero que me dijo fue: ¡Feliz día del amigo!. Fue como un balazo directo al pecho. Yo puse mi mejor sonrisa de mentira y balbuceé un "igualmente". Nos abrazamos bien fuerte como siempre e inmediatamente cambié de tema. Conversamos un rato acerca de cómo andábamos y que fue de nuestras vidas hasta que me dijo: Me hizo mucha gracia tu estado de facebook. En ese momento todo se me nubló y puse una cara extraña, y me preguntó: ¿Y te lo dijo? Yo hice una pausa microscópica para pensar que iba a decir, me reí para no llorar y no pude mentirle, le dije: Si, ya me lo dijo. El puso cara de triste y me dio una palmadita de consuelo. Quedamos en juntarnos a charlar más tranquilos, en ir a tomar un café, aunque ambos sabíamos que era mentira, nunca iba a suceder. Mientras él hablaba, yo solo podía pensar en lo mucho que me gustaba, en todo lo que me sigue provocando y que quizás nunca voy a encontrar alguien tan especial como el. O eso era lo que creía.

Hace unas pocas semanas me enteré de algo que lo cambió todo. El Señor R. era una gran mentira. O por lo menos la imagen que yo tenía de él en mi cabeza. Me contaron que mientras estaba de novio, estuvo con varios chicos y cuando digo estuvo, ya saben a que me refiero. Los invitaba a su departamento y les mentía que estaba soltero o que había terminado su relación. Hasta tiene un perfil falso de facebook y aparentemente hace esto hace mucho y con mucha gente. Cuando me lo contaron por primera vez, no podía creerlo, así que investigué más sobre el asunto y confirmé de varias fuentes que era cierto. De hecho una vez, hace mucho tiempo, uno de los amigos del novio me había dado a entender eso, pero en ese momento, con lo enamorado que estaba de él ni se me cruzó por la cabeza. Ahora es como que me cierran varias cosas que él hace o como se maneja cuando sale solo. Cosas que yo mismo veía pero siempre confié en su honestidad y buena onda. 




Cuando una persona te decepciona así de mucho, es como que no sabes que hacer, ni como reaccionar, ni en que creer. Entonces me pregunte: ¿Qué haces cuando estuviste enamorado por años de una mentira?¿qué pasa cuando te das cuenta que perdiste años de desgaste emocional, en alguien que no valía la pena? Si la mentira tiene patas cortas ¿Cómo es que esta tenía zancos?

Lo sé y lo acepto, el que puso al Sr. R en un altar, todos estos años, fui yo. Creía en él y lo veía la persona más transparente del mundo. Pero eso es normal cuando nos enamoramos de alguien. Te pensás que no hay nadie igual a él y hasta te llegás a obsesionar con esa imagen que tenes de alguien que realmente te gusta. Yo hasta llegué a pensar que éramos el uno para el otro. Hasta es posible que lo haya llegado a amar. Por eso la desilusión y la decepción que siento ahora, es lo más horrible.

Además de sentirme un completo idiota, también me molesta que, como todos saben, no me es muy fácil conseguir alguien que me quiera, y en un momento lo había logrado. Apareció Tián dispuesto a construir una relación conmigo y si bien las cosas no se dieron por muchas razones, una de las más importantes fue que lo dejé por el Sr. R. Porque no me lo podía sacar de la cabeza y sentía que nunca iba a sentir lo mismo por nadie más. ¡Qué bronca!

Pero claro, como iba a darme cuenta. A Pinocho por lo menos le crecía la nariz cuando mentía. Al Sr. R. no se le movía ni un pelo. Pero el cariño y la admiración era tan grande, el enamoramiento y porque no decirlo el amor, me nublaron completamente. Eso habla de lo gigante y poderoso que puede a llegar a ser ese sentimiento. Tan grande como para creer cualquier cosa y dejar de lado toda la experiencia y la intuición. Esto me hizo ver como a veces en el amor proyectamos en el otro, lo que queremos que sea, en lugar de verlo por lo que realmente es. Y si bien sabemos que nadie es perfecto, a veces en el enamoramiento dejamos pasar por alto esas mentiras, para nosotros mismos, para no hacernos daño, o quizás porque todavía una parte de nosotros sigue creyendo que existen esas personas buenas y transparentes. Personalmente sigo creyendo que existen porque de hecho conozco algunas. Al menos eso me alivia un poco. Aunque es verdad que también hay muchas de esas personas honestas y transparentes en relaciones con mentirosos manipuladores. De esos casos también conozco.



Otra cosa que me alivia es que si bien el Sr. R. es una mentira con patas largas, sus sentimientos hacia mí, en algún punto, eran verdaderos. Por sus miradas, por como cada vez que nos vemos se acerca a donde estoy, o por como me observa cuando cree que no lo veo. Está bien, quizás lo hace con muchos, pero al menos en esos momentos lo hace conmigo. Lo sé, es un patético consuelo, pero consuelo al fin. 

Por otro lado, yo también mentí. Mentí y me hice amigo de él para conocerlo más. Pero lo mío fue algo que hago siempre, como un mecanismo de defensa que uso con las personas que sé que no va a pasar nada. Es una forma de convertir el amor en amistad y así por lo menos lo puedo superar y tenerlo cerca de alguna forma. Pero con el Sr. R. no funcionó, porque cada vez que intentaba ser su amigo y conocía algo nuevo sobre su vida, me terminaba enamorando más y más. Hasta que conocí esto, claro.

Entonces de alguna forma ¿es nuestra culpa?¿Nos inventamos mentiras para no sufrir? Quizás sí, quizás sea eso, miedo a sufrir, miedo a ver los defectos de esas personas que queremos. O quizás sea que siempre que nos enamoramos, queremos que esa persona sea lo que siempre estuvimos buscando. Que al fin lo encontramos. Es muy gracioso, cuando nos preguntan qué estamos buscando en una pareja, siempre inventamos una mentira o damos una respuesta cliché. Cuando en realidad no lo sabemos hasta que empezamos a proyectar en nuestra pareja lo que queremos que sea y tratamos de convertirla en eso que buscamos.

Hace unas semanas lo volví a cruzar, después de haberme enterado de todo. Ahora Pinocho era un niño de verdad. Y no les voy a mentir, todavía me quedan un poco de sentimientos y un poco de temblor en las piernas. Pero ya no era lo mismo. Había algo que se había perdido. Y es que lo que me gustaba de él, en gran parte, era su capacidad de estar en una relación y ser fiel. La transparencia y la sinceridad. Lo que me enamoraba de él, se había muerto, ya no estaba, y supongo que con el tiempo, se irán diluyendo mis sentimientos hacia él. De ahora en más, el Sr. R, será el Sr. R.I.P.

En medio de toda esta tristeza y desilusión, el otro día vi que subió a Facebook una foto con su novio y me di cuenta que podría ser peor mi situación. Podría haber dejado todo de lado para estar con él y estar en la situación de su novio, viviendo una mentira. Eso sería mucho peor y muy triste. Ojalá algún día se de cuenta del daño que causa y que se causa a si mismo o mejor aún, que el Sr. R diga la verdad. Sea como sea, hay mentiras con patas cortas y mentiras con patas largas, pero todas tienen talón y mientras más altas son, más fuerte caen, porque si hay algo que se que no es mentira, es que todo cae por su propio peso.




Pablo M. Acuña
twitter | facebook| msn

Pregunta para el foro: ¿Alguna vez te enamoraste de alguien que resultó ser una mentira?

lunes, 23 de julio de 2012

Los Códigos



Últimamente escucho hablar mucho sobre los códigos, los códigos de amistad que supuestamente todos deberíamos tener ante ciertas situaciones o circunstancias. Con el día del amigo me pregunto: ¿Qué es más importante: el amor o la amistad? ¿que pasa cuando un amor se interpone entre dos grandes amigos?¿Que pasa cuando te gusta el ex de un amigo o el novio de tu amigo?¿Que pasa si un ex de tu amigo se enamora de vos? ¿Qué seria tener código en ese caso?. He aquí cinco situaciones que viví que pueden ayudarnos a reflexionar:

[CÓDIGO 1.1.0.] Cuando Te Gusta El Novio De Tu Amigo:

Todo pasó tan rápido, que no me di cuenta. Mi amigo me habia presentado a su novio y comencé a mirarlo diferente. El hacia su parte, pero supongamos que no, supongamos que era solamente yo. Fue muy dificil de superar la situación, sobre todo porque no tenia a mi amigo para contarselo. Mi amigo y él salieron unos pocos meses, pero me contaba todo lo que pasaba entre ellos y con cada cosa que me contaba, en lo único que podia pensar era en que era perfecto para mi y en todo lo que haria diferente si fuera mi novio. Pero claro, no podia hacer nada. Mi amigo estaba enamorado de él y yo no podia hacer nada. No podia alejarme tampoco, porque mi amigo iba a sospechar que me pasaba algo. Decidí guardarmelo todo, hasta que el novio de mi amigo comenzó a invitarme a merendar o  simplemente a acompañarlo a lugares, sin mi amigo. Quizas ahí deberia haber alertado a mi amigo sobre que algo raro estaba pasando, ¿eso hubiera sido tener códigos?. Yo seguia sin creer que era algo más que buena onda pero aún asi, me sentia atraído y me ponia contento. La verdad nos entendiamos a la perfección con el, mucho más que él y mi amigo. Creo que ambos sabiamos eso. Sin embargo, siempre me negué a estar a solas con él. Hasta que un día mi amigo se enojó con el en el boliche, dejándonos solos a los dos. Ahí todo cambió, me miraba diferente mientras bailabamos, yo solo sonreia y no decia nada. El era de esas personas que te hablan muy de cerca. Hasta que en el medio de ese gran momento, por un segundo, se distrajo cuando pasó un chico. Ahí me di cuenta, que la mirada era la misma que me hacia a mi. Entonces entendí que por ese tipo no valia romper los códigos con mi amigo. El era solo una de esas personas que les gusta seducir y como esas personas hay miles, como mi amigo, no. Unas semanas después, ellos cortaron y nunca se lo mencioné a mi amigo.


[CÓDIGO 1.1.1.] Cuando El Chico Que Te Gusta, Gusta De Tu Amigo:

Sería millonario si me dieran 10 centavos cada vez que pasa esto jaja. Recuerdo una vez que un chico me encantaba desde siempre. Lo habia conocido por un video de youtube. Chateamos unos dias y decidimos encontrarnos en vivo por primera vez en un boliche para charlar un rato y vernos en vivo. Yo habia ido con mis amigos y al rato de haber llegado, lo descubrí planeando una estrategia para cruzarse conmigo. El no sabia que lo estaba observando de lejos y que ya lo habia visto pasar. Dio varias vueltas en circulos para cruzarme y saludarme de frente. Me pareció muy tierno. Conversamos un rato, pero cada uno siguió con sus amigos. Hasta que al final de la noche se vino a despedir. Se acercó a hablarme a solas y yo creia que me iba a invitar a desayunar, pero en lugar de eso me preguntó como se llamaba mi amigo de camisa negra porque le habia gustado. Le dije su nombre pero también le dije que estaba de novio. Que era cierto. Igualmente no le conté nunca a mi amigo, aunque deberia haberlo hecho. Unos meses después, nos encontramos de nuevo todos en un boliche, mi amigo de la camisa negra me pregunta por ese mismo chico. Yo le dije que era un amigo simplemente. Me preguntó si me gustaba porque queria ir a hablarle y que los presente. Podria haberle dicho que si, pero no me salió. En este caso mi código de amistad fue mentirle y le dije que no me gustaba, porque si ambos se gustaban, no tenia más nada que hacer. Unos minutos después, estaban besandose en mis narices. Ahora con mi amigo nos reimos aunque en el momento fue feo. Por supuesto que ellos no duraron más que una noche. Desde entonces, también tengo cuidado de los amigos que les presento a los chicos que me gustan o a mis novios. Una vez me pasó de hecho que mi novio se enamoró de mi amigo, al principio solo me decía que le parecía lindo, pero con el tiempo le fue gustando más y más, hasta que no pudo sacárselo de la cabeza. Me dejó por eso, pero nunca estuvo con mi amigo. No era su tipo. 


[CÓDIGO 0.0.1.] Cuando El Ex De Tu Amigo Te Tira Onda:

Mucho se habla de si es correcto alguna vez estar con el ex de tu amigo o de cuanto tiempo deberia pasar antes de hacerlo. Muchas veces pasa con los ex de tus amigos, que tenes la oportunidad de conocer a alguien más a fondo, cuando sale con tu amigo. Comparten reuniones, cumpleaños y llegas a conocerlo mucho mejor. Por lo general yo me llevo muy bien con los novios de mis amigos. Por lo que cuando terminan me resulta dificil ignorarlos o no tenerles cierto cariño por todo lo que pasamos juntos. Además, que no hayan funcionado las cosas con tu amigo, no significa que sea una mala persona, simplemente se dio asi. Entonces no se porque es tan alocado pensar que esa persona que ya conoces como es y con la que compartiste un tiempo, pueda, en un futuro gustarte un poco o viceversa. Claro que esto esta visto como la peor falta de códigos. Aunque para mi, un buen amigo te dejaria estar con su ex en el caso de que crea que pueden llevarse bien; salvo que no lo haya superado. Algo muy importante para mi, es quien dejó a quien. Si tu amigo lo trató mal, le fue infiel o si tu amigo lo dejó porque ya no lo queria, entonces no veo cual seria el problema. Si sucedió al reves, simplemente no creo que el ex de tu amigo te guste. Una vez el ex de un amigo me arrinconó en el baño y me comenzó a hablar mal de mi amigo. Me dijo que el y yo hariamos mucho mejor pareja y que le encantaria que eso sucediera. Por supuesto que le dije que no, además que odio que hablen mal de mis amigos. Más allá de que tenian que ver los códigos, tambien sé cuando el ex de tu amigo te quiere usar para darle celos.


[CÓDIGO 1.0.1.] Cuando Te Gusta El Ex De Tu Amigo:

Esto es algo que me sucede ahora, por supuesto que antes de hacer algo, le pregunté a mi amigo si le molestaria que sucediera algo. Me dijo que no, porque claro, ya pasó mucho tiempo y además es importante el hecho de que no es EL EX de mi amigo. Es decir, no fue una gran historia de amor. Lo que me pasa ahora tiene que ver con eso. Nunca crei que me iba a gustar el ex de un amigo después de tantos años, y sin embargo cada vez me siento mas atraido hacia el, es algo que me tomó por sorpresa y no esperaba para nada que sucediera. Si bien creo que un amigo con códigos no mira nunca al gran amor de su amigo con esos ojos. Tener códigos tendria que bloquearlo de por vida, pero claro, puede suceder. Lo mejor en estos casos es ir de frente desde el principio, plantearselo a tu amigo y ver a que solución llegan juntos. Eso seria tener códigos. Pero eso sí, antes de eso, asegurate de que tus sentimientos son verdaderos y no una calentura pasajera. Si le escondes toda la situación, podes perderlo para siempre, en cambio contándole todo, puede suceder que, como gran amigo tuyo, olvide a su ex, por vos. También creo que es una muy buena forma de olvidar a tu ex, lo digo yo, que estuve en esa situación. Dejarlo ir y que sea feliz con tu amigo, termina en un sentido, hasta siendo terapéutico. 


[CÓDIGO 0.1.0.] A Vos Y A Tu Amigo Les Gusta El Mismo Chico:

Lo mejor en estos casos es buscarse amigos con gustos diferentes, pero la verdad que es muy dificil no coincidir algunas veces. A que grupo de amigos no le pasó de ver un chico mirando en direción al grupo en la pista y no saber a quien mira en realidad. A veces es dificil adivinar, pero se resuelve preguntando. Pero cuando sucede al reves, tener códigos es dejarlo para el que lo vió primero. Cuentas claras conservan la amistad. De última, el que tiene la decisión después es el otro. Los amigos con códigos no deberian enojarse en caso de que el chico elija a otro, que gane el mejor y el otro deberia ponerse contento por su amigo ¿no?. La verdad que no creo que ningún hombre merece que te pelees con tu amigo, de hecho yo siempre digo que mejor que ese chico que les gusta quede en “familia” y no con algún otro grupo de amigos ¿no les parece?


En conclusión, nadie sabe si el amor es para siempre, pero si se sabe que la verdadera amistad lo es. Además recordemos que mientras buscamos el verdadero amor o cuando terminamos una historia de amor, el único que va a estar ahí siempre va a ser tu verdadero amigo. Si queres saber si tus amigos tienen códigos, solo mirá a tu alrededor y fijate bien quienes han estado ahí a tu lado con el paso del tiempo. Yo tengo la suerte de tener un grupo de amigos que, desde hace muchos años, es el mismo de siempre. Por lo tanto, pónganlo bien grande y claro en lo titulares de los diarios: AMISTAD MATA GALÁN. He dicho.



Pablo Martín Acuña
twitter | facebook | msn

Pregunta para el foro: ¿ Qué vale más para vos, un amor o un código de amistad ?

miércoles, 6 de junio de 2012

Las Pruebas

 


Siempre nos dicen: ‘cuando menos lo esperes, va a aparecer’, lo que no nos dicen es que esto  tambien se podria aplicar a los ex. Habia ido a ver a la banda de mi amigo Marcos: Pelopincho, con amigos, hasta que de repente, aparece entre la gente mi ex numero 3.
El y sus amigas se quedaron en una punta de la pista y nosotros en otra. Ninguno de los dos se acercó. Solo sé que nos vimos. No era mi intensión no saludarlo, simplemente dije: no importa, seguramente lo cruce mas tarde y tendriamos una de esas conversaciones por compromiso que se tiene con un ex que duran menos de tres renglones hasta que uno de los dos dice el cordial: bueno, me voy a buscar a mis amigos, pero nos vemos por ahí. Horrible.

Por suerte, esta vez no sucedió. Después del recital no lo volví a cruzar y la verdad, no me importó. Entonces me puse a pensar que en realidad lo habia logrado, claro, era eso: ¡lo habia superado! Esa era la prueba!. ¿En que momento pasó?¿porque nunca nos damos cuenta cuando pasan esas cosas?
De todas formas, por lo general, lo que me pasa es que me resulta más complicado superar una historia que nunca se dio a una que pueda haber tenido con un ex. Llevo más de un año tratando de sacarme al Sr. R de la cabeza y me cuesta mas de lo que me costaron todos mis 5 ex juntos.  Es cuando me pregunto: ¿Cuál es la verdadera prueba de que superaste un ex o una historia?¿en que momento superamos la prueba de superar a alguien?

A veces pareceria que lo logras. Te levantás y tenes un día hermoso afuera, el solcito de otoño es muy lindo. El buen humor te invade como el olorcito a café matutino, las tostadas no se quemaron esta vez. Estás a punto de salir de tu casa y decidís ir al balcón para ver cuanto frio hace y de repente, así, sin más, te acordás de ese abrazo que se dieron ahí una vez. Lo siento, estás desaprobado.



Recuerdo que la primera vez que tuve que superar a un ex casi muero. Terminamos y aunque en buenos términos, sentia que todo el mundo se caia encima. Claro, no sabia toda la gente que tenia que superar después jaja. Ahí fue cuando empecé terapia y toda mi vida cambió, cambié de carrera, me mudé a vivir solo y hasta salí del closet con algunos amigos. Lo único que me llenaba de esperanza era que en esa epoca pensaba que iba a cruzarme con muchas historias de amor. ¿Les digo un secreto? Después de 10 años, tengo que confesar que no fueron tantas ni tan significativas como esa, por eso cuando encuentren alguien especial, lo mejor es dar todo para no arrepentirse después.

Algunos psicologos piensan que el duelo de la separación muchas veces es mucho más dificil de superar que el duelo de la muerte.  Porque claro, cuando uno muere ya no lo tiene que cruzar más. Esta bien, no voy a sobredramatizar tanto, pero a todos nos llega ese momento en que ves al chico que te gustaba o a tu ex con su nuevo novio, en vivo, en fotos de vacaciones en lugares que siempre soñaste ir con él y hablandose con familiares de tu novio.  Seguro algebra no te resulta tan dificil ahora. Si no sentis nada. Prueba superada, has superado a tu ex satisfactoriamente.

Tampoco es algo que se supera con el tiempo, sino tiene que ver más con la historia que hayan vivido. A la altura de mi ex número 4 yo pensaba que ver a mi ex besandose en la pista, a solo una semana de haber cortado conmigo no me iba a doler y sin embargo, casi salgo llorando.  Prueba no superada.
Hay muchas personas que creen que porque no salen y no lo ven, lo superan más rapido. Muchos se pasan meses evitando ir a esos lugares donde sabes que lo vas a cruzar o evitando estar con gente que te puede contar de ellos o alejarte inmediatamente en la pista  cuando ves a amigos de tu ex. Pero una de las pruebas de que lo superaste es justamente no estar pensando en eso. No por nada dicen que lo contrario del amor, no es el odio, sino la indiferencia.



¡Saquen una hoja! Esto es una prueba sorpresa. La más dificil y complicada: LA PRUEBA FINAL es cuando pasa un tiempo significativo de no verlo y aparece de repente. Ahí es cuando verdaderamente podes analizar lo que te pasa y no hay negación u olvido que valga. Ningún miltiple choice puede salvarte, esto es a desarrollar. La gran prueba de ponerte frente a frente con el monstruo. Siempre recuerdo esos momentos como con un sentimiento horrible. Mi madre o mi padre despidiendome esos días que habia prueba en la escuela, los momentos antes de entrar a dar un examen oral en la facultad o antes de un examen médico en la sala de espera; todos son momentos de completa vulnerabilidad y soledad, donde pareciera que nadie te puede ayudar más que vos mismo.

En esto de cruzarte con tu ex, solo pueden pasar dos cosas: la primera es que no pase nada, charlar tranquilamente y relajado, que estés pensando en otra cosa y hasta que cuando lo veas te parezca alguien aburrido o quizas hasta se te cruce ‘como pude estar alguna vez con este tipo’ ó puede que pase lo peor. Que en un descuido te distraigan sus ojos, que un minimo segundo pensés en abrazarlo, que sin querer te quedes mudo o al contrario se te enrieden todas las palabras, o te vuelvan esos impulsos fisicos de querer acercarte. De que te distraigas pensando en sus labios o de las rayitas que se le hacen en la cara cuando se rie. Ahí, en ese microsegundo podes perder todo lo que estuviste tratando de superar. Es como cuando en una prueba de matemáticas calculás mal un número e invalidas todo el ejercicio, quizas sabias perfectamente como llegar al resultado, pero te distrajiste y lo arruinaste todo.  Al recuperatorio.

Sin embargo, me alivia un poco que lo que me pasó con mi ex esta noche, puede suceder. Finalmente superé esa prueba. Y sin resentimientos, sin nada que resolver, tranquilo. ¿Mencioné que ese es mi único ex que en teoria está casado? Y aún asi, me pone contento por el. Quizas entre tanto hablar del tema, o de escribirlo en columnas, en algún momento apareció otra persona y lo superé sin darme cuenta. Hice la prueba con los ojos cerrados y aprobé. Puede suceder.

Algunos los superamos escribiendo, otros llorando un tiempo, otros en terapia, otros repitiendole la historia a sus amigos hasta el cansancio, otros escribiendo obras de teatro enteramente dedicadas a sus ex. Hace poco fui a ver a mi amigo Tomás en la obra ‘Tu Sonrisa En La Nieve’ de Pablo Martella, que no quiero contar, prefiero que la vivan, pero toca este tema de superar alguien, del duelo, lo que uno pasa, hace o deja de hacer para superar una historia. Y en muchos momentos me sentía retratado en la obra, porque claro es algo que todos vivimos, una prueba que todos tenemos que superar eventualmente y si tenemos suerte se convierten en excelentes obras de arte que llegan a miles de personas que te aplauden de pié. ¿Acaso no es eso un final feliz finalmente?

¿Por qué tardamos tanto en superar a alguien entonces? Con el Sr. R se me están acabando las estrategias. Ya probé ser su amigo, no serlo, probé conocerlo mejor para no idealizarlo, probé ignorarlo, probé no entrar a su facebook, probé verlo feliz en pareja, probé no verlo durante 6 meses y nada parece estar funcionando.

Mi amigo Ignacio me pasó un texto que decia que rara vez las parejas terminan su relación a causa del amor. En realidad lo que termina la relación es más la indiferencia. Hay muchas chances de que tu te siga amando pero las personas en las que ambos se convirtieron no pueden estar juntos. Es decir, la situación o la relación es la que en realidad no pudo sobrevivir.  El amor sobrevivió, pero todo lo demás no.  Entonces  quizas hayamos estado haciendo mal toda la prueba. Quizas lo que menos deberiamos hacer seria aferrarnos a ese amor para superar a alguien, sino aceptar que las cosas se dieron de cierta forma y que no pueden estar juntos.

Aunque con mi ex numero 3 esa noche nos hayamos tratado como completos extraños, yo sé que al igual que yo, él sintió algo. Porque ahora sé que el amor no se supera, pero si las situaciones. 



Pablo Martín Acuña
twitter  | facebook | msn

Pregunta para el facebook: ¿Cuál fue el ex o la historia que más te costó superar?

viernes, 11 de mayo de 2012

Las Novelas


Habia una vez…“El le pide que salga de su edificio. Al llegar abajo, se encuentra con un pasacalles que le pide volver a ser novios. El ahora tiene que decidir si regresar con el amor de su vida o seguir con alguien que le promete algo nuevo ”. “En esa despedida, yendo hacia a el aeropuerto, en el medio de una tensa pelea, él cansado de todo y casi al borde de las lágrimas, espera al rojo del semáforo y se baja del taxi, bajo la lluvia sin mirar atrás”. “Toda la noche, no dejaron de mirarse en la pista. Finalmente, él tomó valor, escribió su número en una servilleta y justo cuando se estaba yendo, lo agarró de la mano y se la dio. La semana siguiente, se encontraron en el mismo lugar, él había dejado a su novio, solo para estar juntos. Y bailaron lento, en esa misma pista que se conocieron”. “Después de haber terminado, el destino los vuelve a juntar. Él dice haber cambiado y está dispuesto a hacer todo para arreglarlo, sin embargo no es suficiente. Ya es demasiado tarde le contesta. Ambos se despiden con melancolía”. “El estaba contento de haberlo conocido esa noche, de haber charlado unos minutos con él. Mientras él esperaba un trago en la barra, lo ve a lo lejos, y no lo puede creer, él estaba besándose apasionadamente a su mejor amigo”. Todas estas no son escenas de una novela, cualquier semejanza con la ficción, es pura coincidencia. De hecho son escenas de anécdotas mías, de mis amigos y de amigos de amigos. Mucha gente cree que las cosas que suceden en las novelas, no sucederían nunca en la vida real y les puedo asegurar que muchas veces cuando escucho estas anécdotas, lo único que pienso es: ‘que buena novela…contame más’.

A veces pensamos que estas historias no pueden suceder en la vida real o que son cosas que solo pasan en la secundaria, yo las he visto suceder en todas las edades y puedo asegurarles que hay veces que son mucho más fantásticas, mas cursis y más increíbles que en las novelas de la tele. En el fondo, aunque no todos lo quieran aceptar, queremos formar parte de una novela y hasta ser protagonistas. Esta semana en medio de una charla con amigos surgió la pregunta: ¿Cómo empieza una historia de amor? Y pensé en todo lo que debería tener ¿o que diferencia a una historia de amor, de una de una noche?¿cuando y como, una situación se convierte en la novela de tu vida?

Después de recolectar un poco de información por aquí y por allá, llegué a reunir un par de ingredientes básicos que no pueden faltar en una historia de amor.

En las novelas (las de Cris Morena o Pol-ka, por ejemplo) siempre los personajes tienen que chocar o colapsar. En un auto, en una bici o en lo que sea que puedan impactar dos vidas totalmente diferentes, de diferentes clases sociales o de diferentes culturas. Pero en la vida real, nunca nos enamoraríamos de alguien que nos choque el auto. En la vida real necesitamos mucho menos drama. Solo necesitamos, lo que yo llamo: EL MOMENTUM. Ese instante en que ves a alguien nuevo y todo se detiene cuando ambos se prestan atención. Pueden ser microsegundos o puede ser una larga escena en la que todo es en cámara lenta. El Momentum se siente, es inexplicable, sucede cuando menos lo esperas. Quizás ese día te presentaron a un amigo de un amigo, o estabas aburrido y lo viste llegar, o hubo de repente algo que te llamo la atención cuando lo viste bailar con sus amigos en la pista. Quizás lo viste pasar por el pasillo de tu facultad o distraído por la calle, de repente se miraron. Claro que, para que sea un verdadero MOMENTUM, tiene que suceder de los dos lados, nada más poderoso que ese momento y se siente en todo el cuerpo. Lo he vivido.

La última vez que me sucedió, fue durante un desayuno después del boliche. Había ido obligado por mi amigo Damián que no se quería quedar solo con el chico que le gustaba y sus amigos. Entre esos amigos y entre ese desayuno estaba él. Se llamaba igual que yo pero estaba de novio, a diferencia de mí. Estábamos sentados uno al lado del otro y mientras los otros conversaban sobre que se conocían de la niñez, Pablo y yo conversábamos. Es ahí cuando comencé a sentir su mirada y me puse nervioso y el también. Y de repente trajeron los desayunos y la mermelada, y ahí sucedió, en el medio de todo el movimiento, me dijo:"Permiso, puedo usar tu cuchillo para untar". Yo no podía creer que me estaba pidiendo permiso para eso y nos miramos y nos sonreímos y le pasé el cuchillo. Todo el mundo había desaparecido, éramos solo nosotros dos, por ese microsegundo en el que le pasé el cuchillo. Así comenzó una historia de amor. Una que nunca se concretó, pero durante mucho tiempo, cada vez que nos encontrábamos por ahí, no podíamos dejar de mirarnos de esa forma.


Pero para que sea una verdadera historia de amor, tiene que tener un ingrediente importante: EL OBSTACULO. Mientras más grande sea el obstáculo, más intensa la historia de amor. Esto puede ser algo abstracto como la distancia, las diferencias sociales, el miedo a enamorarse otra vez y que falle o que uno de los dos esté comprometido amorosamente; o también puede tener un obstáculo más físico: un Villano. Ese amigo maldito que siempre le caen mal los novios de su mejor amigo porque le tiene ganas, el novio mismo del chico, un ex que siempre quiere volver , la familia y el más temido de todos: UNO MISMO Y SUS BARRERAS.

Mi segundo novio, era un empleado doméstico y nunca pensé que la diferencia social, fuera a ser un problema. Pero lo fue, él siempre pensó que yo me merecía algo mejor y que lo iba a dejar por alguien que me ofreciera más de lo que él podía ofrecerme. Esos celos, terminaron por separarnos. Sin embargo el fue el primer hombre que me dijo: te amo y fue al primer hombre al que se lo dije.

Alguien muy importante en las historias de amor es EL HADA MADRINA. Que en las novelas por lo general es ese personaje secundario, simpático que es el confidente del principal. Siempre está bueno tener alguien que apoye la relación, que te dé un punto de vista diferente al tuyo y que te conozca a fondo para que, si es necesario, retarte o resaltarte las cosas que podrías cambiar para que todo funcione y no cometas los mismos errores de siempre. Una especie de convertir calabazas en carrosas.

Yo sé mucho de Hadas Madrinas, porque por lo general siempre ocupo ese lugar: Always the fairy, never the groom (siempre el Hada, nunca el esposo).

Otro elemento esencial de toda historia de amor es LA PAUSA ANTES DEL EPICO REENCUENTRO. Esto diría que es lo que justamente separa a las historias de amor, de las historias de una noche. Porque para que sea una gran historia, tiene que tener muchas etapas y toda buena historia de amor, tiene esa parte de después pasamos un tiempo sin vernos, un clásico. Los personajes principales, se alejan por un tiempo, están con otras personas, sufren, lloran, reflexionan, crecen, pero nunca logran olvidarse el uno del otro. En las novelas, aparece el cartel de años más tarde y todo cambia. Y por esas cosas de la vida, llámese destino o "el mundo es un pañuelo doblado en cuatro y de los chiquitos", los personajes se reencuentran en una situación épica y entienden que siempre deberían haber estado juntos. Si la pausa no es suficientemente larga, entonces quizás nunca se convierta en una historia de amor, quizás solo sea un simple capricho. Así mismo si no existe el reencuentro, entonces puede ser el final. No tenía que suceder, era simplemente algo pasajero.

En la novela El Clon, los persoanjes principales, viven en diferentes países y se ven después de muchos meses, a veces años, Pero cada reencuentro era épico y el raiting explotaba. En ese estado estoy con el Sr. R. Desde año nuevo que no se nada de él, no tengo ningún tipo de contacto. Estoy evitando encontrarlo, para tratar de olvidarlo. Pero sé que si nos volvemos a encontrar podría ser épico y todos los sentimientos podrían volver a resurgir. Lo que me da un poco de miedo, porque no se si es lo que quiero.



Y finalmente, o casi finalmente, viene el último elemento: LA SENSACIÓN DE FINAL FELIZ.Que no es en realidad el fin de la historia, de alguna forma es el comienzo. Esa sensación de que finalmente lograste al fin el objetivo de estar con quien querías estar. Si después de esto suceden cosas malas o desagradables, siempre vas a tener el recuerdo de haber triunfado al menos en este momento. Sensación clave que va a servir mucho, si alguna vez esta historia de amor falla y queres comenzar otra.

Muchas historias de amor, comienzan por la web, soy consciente de eso, pero nunca van a ser tan emocionantes como las que suceden en vivo y cara a cara. En realidad, si lo pensamos bien, esas historias de amor, no comienzan hasta que se conocen personalmente, entonces la verdad, es agregar una etapa más, a veces, innecesaria. Y en cuanto a la edad, siento que tiene muy poco que ver. Nosotros crecemos, pero los sentimientos siguen teniendo la misma edad. Quizás se gasten un poco, quizás se vean un poco opacados por malas experiencias, pero las sensaciones de estar viviendo una historia de amor, van a ser siempre muy rejuvenecedoras.

Aunque haya personas que les parezcan muy cursis las novelas, son nuestra debilidad, suceden todo el tiempo y siempre terminas siendo parte de una. Hay que tratar siempre de ser el protagonista y en lo posible, el galán!


"Mi amor, mi corazón está todo golpeado y roto en soledad, cuando estamos separados…Sé que debería ser fuerte pero pierdo el control, luchando conmigo mismo, tratando de esconder lo que no sabes. Pero me pongo débil, termino dándote todo, se que no es sabio confesar tanto, pero todas las reglas se rompen cuando miro tus ojos" – Westlife (con imágenes de la película Weekend)

Pablo M. Acuña
twitter | facebook | msn

Pregunta del foro: ¿Cómo comenzó tu más reciente historia de amor?