martes, 4 de diciembre de 2007

Fotocopias De Fotocopias



Anoche, chateando con un chico que conocí por internet, estábamos haciendo el ping-pong de preguntas básicas. Cuando llegamos a la pregunta: ¿Qué estudias? Yo le cuento de lo mío y antes que él me contestara, le pregunté si era psicólogo. A lo que respondió muy sorprendido: Si, ¡¿Cómo sabés?!. Para que no pensara que yo lo conocía y que estaba jugando con él, tuve que contarle de mi patrón de relaciones y de porque estaba siempre destinado a tener relaciones con psicólogos.Le conté que los últimos tres chicos que conocí y con los que iba a empezar algo, pero no pasó nada, eran psicólogos. Mi primer novio, también lo era. Mi segundo novio siempre quiso serlo y volviendo a donde todo esto comenzó, mi primer amor de secundaria quería estudiar psicología, y de hecho ahora se está por recibir. La última persona a la que le dije te amo estudia psicología. Mi última cita fue con un psicólogo y mi última obsesión (por no decir actual) estudia psicología también. Y así podría seguir hasta el final de mis días, porque los psicólogos son obviamente mi patrón de relaciones. Si bien a muchos de ellos no los busqué, las cosas se fueron dando como si estuvieran destinadas. O simplemente me atraen ese tipo de personas y mis sentidos y mi cuerpo parecen saberlo bien.

Esto tiene sus ventajas y desventajas. Por un lado ya sabes que esperar de ellos y que esperar de vos, cuando estas con ellos. Sabes que si hacen ciertas cosas te van a enamorar aun más y sabés cuando están por dejarte y porque. Sabés que les gusta y como conquistarlos. Pero, esto de estar en relaciones una y otra vez con un mismo tipo de persona ¿acaso no es como salir con una misma persona, una y otra y otra vez, siempre haciendo lo mismo y tropezando siempre con la misma piedra? Y si lo sabemos (porque en el fondo lo sabemos) ¿Por qué lo seguimos haciendo?¿somos cómodos o masoquistas?

A veces es muy difícil romper con un patrón, porque muchas veces tratando de probar nuevas relaciones, con personas totalmente diferentes a lo que venias acostumbrado a conocer, finalmente sentís como si faltara algo y ahí mismo es cuando empezás a compararlo con tu relación anterior. GRAN ERROR. Nunca hay que comparar las relaciones sobre todo porque cada una se da en una etapa diferente y con un contexto diferente y hasta muchas veces nosotros éramos diferentes y tu ex también. Es ahí donde comenzamos a cometer otro gran error, el amoldar una persona diferente a nuestro patrón de relaciones y transformarlo en alguien que no es. Algunos se amoldan a la perfección (los que realmente te quieren). El problema es muy simple y lógico, si transformas a alguien en tu patrón de relaciones y el actúa igual que tus dos ex con los que ya no estas saliendo ¿que te hace pensar que en el futuro el no te va a dejar?

Supongo que es más cómodo y fácil saber como va a reaccionar una persona, en lugar de andar preocupándose y acostumbrándose a alguien nuevo, que no sabes lo que piensa o siente, ni de que modo lo hace. Nos cuesta acostumbrarnos a lo nuevo, a lo desconocido. Sobre todo por miedo y por no animarse a un nuevo tipo de relación Pero ¿no es mejor afrontar algo nuevo a estar con alguien sin sorpresas, que o te termina aburriendo o termina haciéndote el mismo daño que te hicieron tus relaciones anteriores y terminas diciendo: ‘¡siempre me pasa lo mismo!’?¿No es más divertido conocer a alguien con sus propios misterios e ir descubriéndolos día a día? Si las respuestas a estas preguntas son NO, entonces deberías preguntarte porque no volvés con tu ex.

Por otro lado está el problema de que por lo general nuestros patrones son físicamente parecidos también. Porque nos atrae mayormente el mismo tipo de gente que hace el mismo tipo de cosas por lo tanto se parecen entre si. Al mismo tiempo, todos somos patrones de alguien o vamos a serlo algún día, lo que es reconfortante y terrorífico al mismo tiempo.
Igualmente debo aclarar que no estoy diciendo que todas las personas son iguales o tienen las mismas personalidades, sino que en el fondo, nosotros somos bastante culpables de que estas personas se conviertan en nuestros patrones y actúen como nosotros queremos que lo hagan, porque no estamos listos para una relación diferente.

Es por eso que debemos terminar con los patrones, animarnos a lo nuevo y vivir nuevas experiencias. Y si no estas listo, por lo menos divertite conociendo a gente diferente y desafiá tus sentidos.¡Basta de siempre lo mismo! Recordá que en la mayoría de los casos, por suerte, terminamos con alguien que nunca nos hubiéramos imaginado y que las fotocopias de fotocopias, siempre salen mal.

Pabl3Te

1 comentario:

Juan Hincapie dijo...

Totalmente de acuerdo! es más hace poco hablé del mismo tema con mi ex mejor amigo debido a sus constantes decepciones amorosas y llegue a esa conclusión con él, pero vaya que es un tipo terco y no quedó muy convencido.